Hallan en la Pirámide del Sol escultura de Huehuetéotl, una señal del nuevo tiempo y del cambio de conciencia.

                                          Foto: Presidencia de la República mexicana

Este año 2013 trae consigo cambios impresionantes, el mundo cambia todo el tiempo, segundo a segundo, pero tal parece que los cambios vienen en este nuevo periodo de manera drástica. La renuncia del Papa, las pruebas nucleares en Corea, el asteroide que peligrosamente se aproximará a la tierra el viernes 15 de febrero son sin duda alguna muestra de que las cosas están tomando un rumbo extraordinario.

Precisamente cuando entramos a un nuevo sol y el mundo está cambiando aparece esta deidad, asociada al fuego (curiosamente en una era donde el sol está atravesando una extraordinaria actividad de explosiones) encontrada en una excavación en la pirámide del sol por el arqueólogo Alejandro Sarabia junto a su colega, el doctor Saburo Sugiyama.

Recordemos que los mayas, en su calendario señalaban el 21 de diciembre de 2012 como la fecha en que el quinto sol termina para dar paso al sexto sol: un sol caracterizado por que "iniciará el fin del mundo de materialismo y destrucción donde vivimos e iniciará una nueva etapa de respeto y armonía. Antes de ese día, la humanidad deberá optar entre desaparecer como especie pensante que atenta contra el planeta o evolucionar hacia la nueva era de integración con el resto del universo” (fuente www.emerz.net)

La relación armónica con la naturaleza, el respeto con las otras formas de vida, la aceptación de que la vida es vida y que no puede jerarquizarse (pensando que la vida de las otras especies es inferior a la de los humanos por ejemplo) y el estudio del universo nos harán entender que el materialismo es algo obsoleto ya. Esta era requiere de un arduo trabajo espiritual, sin caer en las trampas de las religiones ni de las corrientes ideológicas políticas que han sometido al mundo y que lo han alejado de su esencia.

Nada es casualidad y sin duda vienen cambios tremendos que transformarán al mundo. Pero no podemos quedarnos pasivos, hay que comenzar a trabajar en el cambio de conciencia y comprender que el universo nos pertenece y nosotros a él, es el momento del todo y el solo uno, así como el universo que está formado por todos sus elementos y todos sus elementos lo conforman a él. La armonía es el camino, pero esa armonía comienza en el uno, que es a su vez el todo. 

Puede parecer complejo de inicio, pero poco a poco iremos explorando toda esta idea. El cambio de conciencia global ha comenzado, y a todos nos corresponde saber nuestro lugar. Entonces el mundo será otro y nuestro universo distinto